Los equites o nobles a caballo irán mas acorazados, con armaduras de escamas (tanto ellos como los caballos), constituyendo una caballería pesada denominada "clibanarius".

Estos jinetes, aunque ya existían desde el 69d.C., cuando unidades sármatas fueron alistadas por Vespasiano, se generalizaron con Aureliano, hacia el 275d.C.

Su casco rodeaba la cabeza casi por completo. Algunos portaban una máscara.  Llevaban cota de malla en manos y partes que requieren flexibilidad (codos, rodillas, etc).  Los muslos y brazos se cubrían con placas y el tronco con cota de escamas rectangulares sobre cota de malla.

La lanza (contus) era muy larga pero la ausencia de estribo (los avaros lo introdujeron siglos después) impedía que se pudiese hacer mucha fuerza en choques frontales y se sujetaba con las dos manos, cruzada sobre el cuello del caballo.

Los cascos pasan a modelos compuestos de varias secciones unidas por remaches, de peor calidad. 

Por otro lado, se produce una "paramilitarización" de la sociedad: los terratenientes, que poco a poco van desplazando a los pequeños campesinos (estos no pueden competir con los precios fruto de una mano de obra esclava) entre los que reclutan sus "guardias personales", ante la inestabilidad social existente por las revueltas de los bagaudas (esclavos fugitivos y campesinos arruinados) y las invasiones germánicas.  

En Hispania, la aristocracia local reclutó ejércitos privados de autodefensa, al igual que Galieno hizo en Francia.  Es muy posible que en nuestra provincia romana (Rauda, Termancia, Clunia, Secovia, Confluentia,...) algunos jinetes estuvieran armados así, principalmente los jefes.

La presión militar de los pueblos germánicos: Godos, Francos, Vándalos,... aumentó en las fronteras del Imperio.