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Paulatino
pero claro abandono de los modelos altomedievales. Coincide con los
reinados de Alfonso VI y VII, que empujaron la frontera castellana hasta
el Tajo y tierras manchegas. Se introducen con éxito tácticas de
caballería pesada con la lanza como arma de choque.
Existe muchos intercambios con Al-andalus y muchos guerreros cristianos sirvieron como mercenarios (farfan)
en los reinos de taifas.
En
general usaban el estilo franco aunque más ligero.
Lanzas
La caballería comienza a
portar la lanza bajo la axila (lance couche)
y convierte a la caballería en una formidable arma de choque en las
batallas campales, muy difícil de contrarrestar por la infantería o por la
caballería ligera . Este cambio provocará la evolución de las
defensas corporales lo cual afectará inevitablemente también al resto de
armas ofensivas, las cuales tenderán a una mayor contundencia o capacidad
de penetración.
Espadas
Perviven las espadas de
corte o tajadoras, con hoja ancha, doble filo y con acanaladura central (vaceo),
que se habían generalizado en Europa a partir del IX.
Lorigas
Se hace necesario proteger
mejor el cuerpo y se generalizan las lorigas de mallas y, en menor escala,
las de escamas o laminares, que cubrirán por debajo de las rodillas.
Las piernas siguen desprotegidas y se cubren de vendajes de lana, cuero o
tela recia. En este siglo ya es habitual el uso de manga larga entre
caballeros aunque los peones usaran lorigones de manga corta, por su menor
coste y mejor movilidad.
La monta
Las cargas con lanza
imponen la monta "a la brida", con los
estribos muy bajos y las piernas estiradas. Proporciona al caballero
un mejor equilibrio hace necesario proteger mejor el cuerpo y se
generalizan las lorigas de mallas y, en menor escala, las de escamas o
laminares, que cubrirán por debajo de las rodillas.espadas de corte o
tajadoras, con hoja ancha, doble filo y con acanaladura central (vaceo),
que se habían generalizado en Europa a partir del IX.
Escudos
Perviven los escudos redondos pero abundan los
almendrados o de cometa, mejor adaptados a las nuevas tácticas de carga
con lanza ya que protegen todo un flanco, incluyendo la rodilla y
pierna.
Cascos
Predomina el yelmo cónico con nasal, continuando la
tradición desde el IX. erviven los escudos redondos pero abundan
los almendrados o de cometa, mejor adaptados a las nuevas tácticas de
carga con lanza ya que protegen todo un flanco, incluyendo la rodilla y
pierna.
Ballestas
Aunque usadas desde el siglo X, tanto en Al-andalus
como en los reinos cristianos, se difunden en este periodo como una
respuesta de la infantería ante el creciente empuje de la caballería.
Al-Andalus
En Al-andalus, se arma una infantería muy similar a
la cristiana y aunque existen unidades de caballería ligera de antigua
tradición norteafricana, se adoptan unidades de caballería pesada, al
estilo de los "rumíes" o cristianos.
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Este
guerrero musulmán
está
basado
en una escultura de Santo domingo de Silos y las pinturas de San
Baudelio de Berlanga.
Viste una cota completa, de estilo
europeo. Incluso ha adoptado la costumbre de cubrir
hasta la nariz con una
ventalla de
sortijas,
típica de batallas con muchos arqueros enemigos.
El
casco es típico musulmán andalusí, al igual que el fajín atado a
la cintura.
El
escudo aunque de forma de cometa está decorado con
motivos norteafricanos y forrado en piel.
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Establecimiento de ordenes militareas europeas
(Templarios, y Hospitalarios) y aparición de órdenes hispanas
(Calatravos). Consolidación de las milicias concejiles como
principal fuerza militar de la Extremadura castellano leonesa. El
auge de la caballería pesada cristiana obliga a su adopción parcial en
Al-andalus, donde pervive el uso de la caballería ligera.
Espadas
Perviven las espadas de
corte o tajadoras, con hoja ancha, doble filo y con acanaladura central (vaceo),
que se habían generalizado en Europa a partir del IX.
Lanzas
Surge un nuevo estilo al cargar con lanza llamado "a
sobremano" que permite apoyar la lanza sobre la cadera y el
antebrazo. Esto permite usar lanzas más pesadas y mejorar la
precisión, dando aun mayor contundencia a las cargas de caballería.
Lorigas
Se acorta por encima de las
rodillas. Se complementa con cofia o almofar para proteger el
cuello, con calzas o brafoneras para proteger las piernas y con manoplas o
maniquetes para proteger las manos.
Escudos
También se acortan pues no son necesarios para
proteger las piernas con brafoneras. Siguen siendo muy comunes los
escudos redondos. En los de tipo almendrado o cometa, la arista superior
se hace recta para apoyar la lanza.
Cascos
Para proteger el rostro en los cada vez más intensos
choques, los nasales evolucionan a faciales más amplios, tanto en los
tradicionales yelmos cónicos como en los nuevos semiesféricos que
acabarán imponiéndose.
Parece ser
un
elemento realmente hispano los cascos con protectores
faciales.
A veces esta protección estaba integrada con el frontal y se
perforaban los orificios de los ojos y otras era una
placa
aparte y
remachada al
frontal del
casco. Existen
muchos
ejemplos esculpidos en capiteles
navarros y castellanos. Lo que se desconoce es si tendrían
orificios para la respiración ya que no se aprecian estos detalles.
Ballestas
Se adopta el estribo, lo que facilita la operación de
tensar el arco o verga. Con el estribo aumenta la cadencia y se
usan vergas más potentes. Sigue jugando un papel fundamental
de apoyo a la infantería para contrarrestar el incremento de potencia de
las cargas de caballería pesada.
Al-Andalus
En Al-andalus, se arma una infantería muy similar a
la cristiana y aunque existen unidades de caballería ligera de antigua
tradición norteafricana, se adoptan unidades de caballería pesada, al
estilo de los "rumíes" o cristianos.
Fin del reinado de Alfonso VIII y reinado de Fernando
III, que darán a Castilla toda la Mancha y parte de Al-Andalus.
Sigue la tendencia a acorazar al caballero y su montura.
Escudos
Surge un modelo típicamente español con lados
paralelos y remate inferior semicircular. Permite cambiarlo
facilmente a ambos flancos del caballo y no necesita ser muy largo ya
que las piernas irán protegidas por calzas o brafoneras. En Europa
se extenderá este modelo y luego otro similiar pero remate inferior
apuntado.
Cascos
Son cada vez más envolventes. Se continuan
agrandando los faciales y se añaden nuqueras.
Monturas
Se acorazan los caballos con pesadas gualdrapas y
piezas de malla. La silla evoluciona hacia un modelo con un arzón
posterior muy alto, sobre el que se apoyan los riñones del caballero.
Aunque es el punto álgido en la difusión de las
lorigas, comienza paulatinamente la incorporacion de placas o launas de
metal ya que las lorigas de sortijas son insufientes ante el poder
ofensivo de lanzas, mazas y ballestas. En Al-andalus se mantiene el
uso de la caballería pesada con la tradición de la caballería ligera,
mantenida por el continuo aporte de tropas norteafricas mercenarios, como
los bereberes y benimerines. Es el nacimiento de la famosa adarga
andalusí con forma de óvalos enfrentados. Abarca los reinados de
Alfonso X, Sancho IV y Fernando IV
Lorigas y fojas
Comienzan a añadirse placas (también las denominaron
platas, en el XIV) como refuerzo de las partes más expuestas de las
lorigas de malla o sortijas.
Aunque la escasa documentación no aclara si podrían
ser de cuero o acero, ni su modo de construcción, las fojas son una
especie de chaleco con faldones, en los que se cosían o remachaban
placas sobre una base de cuero o tela recia.
Ballestas y arcos
Presentan gran diversidad y su importancia es enorme,
aunque en Al-andalus también se mantiene el aprecio al arco, por
aparecer alguna alabanza de su uso en el Corán y por estar muy indicado
para su uso con tácticas de tornafulle, de clara inspiracion oriental.
Cascos
Aparecen los yelmos cerrados pero sin visera móvil,
muy adecuados para las cargas de caballería pero incomodos para la lucha
a pie. Tambien aparece el yelmo con faldón, capelina o chapel de
ferre, idonea para la lucha bajo el sol y siempre con almófar cerrado
sobre la cara.
Espadas
Aparece una nueva hoja, con vaceo central en el
tercio fuerte pero doble filo y perfil en rombo o diamante. Acabada en
punta es eficaz por corte contra las lorigas de mallas y por estoque
contra las placas y yelmos cerrados.
Entre los peones es común el uso de cuytelos o
cuchillo puñal. Son espadas o grandes cuchillos de un solo filo
que en ingles se conoce por falchion
Mazas
Aparece un nuevo tipo, con navajas o nervios
triangulares o crestados. Es eficaz contra las placas y pervivirá
hasta el siglo XV.
Cota de armas
Empieza a ser habitual vestir un sayón, generalmente
sin mangas o manga corta, sobre la loriga o fojas, cubriéndolas.
EN esta cota se suele coser o pintar dibujos heráldicos que permitirán
identificar al portador.
Monturas
Comienza a introducirse la espuela de rueda.
Algunos caballos se protegen con testera.
EN Al-Andalus sigue conviviendo la caballería ligera
(por influencia de mercenarios bereberes) con la pesada (por necesidades
de enfrentarse a los oponentes cristianos).
Escudos
Surgen las adargas, de cuero y forma de dos
semiovalos unidos (arriñonada). Muy ligeras y adaptadas a la lucha
"a la jineta" que pervivirá en la frontera andalusí hasta el final de le
Edad Media.
BIBLIOGRAFÍA
[1] Evolución del armamento medieval en el reino
castellano-leonés y Al-Andalus (siglos XII-XIV) Colección Adalid.
Servicio de publicaciones del EME
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